Externalizar la contabilidad de tu empresa te aporta muchos beneficios. Estos beneficios pueden sintetizarse en que tus empleados dispondrán de más tiempo para centrarse en las tareas más importantes (ese 20% que diría Pareto) y que tu contabilidad estará en manos de profesionales contables en constante actualización.
Ahora bien, es importante tener en cuenta que la externalización de la contabilidad supone una pequeña, pero cuidada, dedicación de tiempo para hacerlo de la mejor manera posible y no dejar atrás ningún tipo de información o dato relevante. Este sería el principal error. No dedicarle el tiempo que se merece al proceso de externalización.
Es decir, cuando te decidas a externalizar la contabilidad de tu empresa, si se trata de un negocio que ya lleva tiempo funcionando, debes dedicarle tiempo. En Morante Asesores, por ejemplo, tenemos detallados toda la documentación que deberás entregarnos para hacerte la tarea más cómoda.
Delega la contabilidad y supervísala
Otro error muy frecuente es no delegar la comunicación a un empleado responsable. En algunos casos, pensamos que si delegamos la contabilidad podremos dedicarle tiempo a la gestión con la nueva empresa. Pero, la realidad es que día a día te consumen tareas estratégicas más importantes para tu empresa. Por tanto, siempre recomendamos que dispongas de una persona que pueda comprometerse.
No obstante, disponer de una persona que esté al frente de esta gestión no implica que debas desprenderte totalmente de la contabilidad de tu empresa. Aquí se encuentra otro de los errores más frecuentes. Siempre recomendamos que te mantengas actualizado de los informes y lleves un control financiero de la contabilidad. La diferencia, en este caso, es que dispondrás de personal experto que te enviará informes detallados con los datos más relevantes para facilitarte la tarea.
¿Sigues teniendo dudas sobre la externalización de la contabilidad de tu empresa? Contacta con nosotros y cuéntanos cuáles son. Nuestro equipo de expertos estará encantado de solucionarlas y asesorarte con la externalización.