El autoempleo es una tendencia que va cogiendo peso. Pese a que con la llegada de la crisis económica muchos autónomos se vieron obligados a finalizar su actividad laboral y darse de baja, cada vez son más los que se lanzan a emprender su propio negocio de manera independiente.
El colectivo de los autónomos es muy importante, junto a las pymes, en el tejido productivo español. Los trabajadores por cuenta propia han tenido un papel significativo dentro de las políticas de empleo formuladas en los últimos años. Entre ellas, destaca la puesta en marcha de la tarifa plana de 50 euros para darse de alta en el RETA.
Aunque hay unas medidas que afectan a todos los autónomos en general —a cierre de 2015, figuraban en el registro de alta casi 3,17 millones de personas— lo cierto es que en la Comunidad de Madrid y la de Andalucía los autónomos encuentran más facilidades económicas para emprender. Esto hace que ser trabajador independiente sea más rentable en función de la comunidad que elijas para establecer tu actividad.
La Comunidad de Madrid anunció la ampliación de la tarifa plana de 50 euros durante un año más, a los seis meses existentes ya. Como añadido, también hay otros planes en esta región, como el Plan Renove de maquinaria, dirigido a todos los autónomos que necesiten sustituir maquinaria vieja con el fin de mejorar la calidad del puesto de trabajo. También, durante 2015, pudieron acogerse a subvenciones de hasta 4.000 euros si contrataban a un trabajador.
Por su parte, en Andalucía se han puesto en marcha una serie de medidas urgentes para reactivar el mercado laboral. Entre ellas, se contempla una dedicada al fomento del trabajo autónomo. Se recogen subvenciones para desempleados, con ligeros cambios en función de los beneficiarios: 4.000 euros para menores de 30 años; 4.500 euros para mujeres; y para hombres y mujeres con discapacidad, 5.000 y 5.500 euros, respectivamente.