El 1 de septiembre entró en vigor el texto refundido de la Ley Concursal. Se trata del Real Decreto Legislativo 1/2020, de 5 de mayo. Y se ha publicado con el objeto de sustituir a la Ley 22/2003, de 9 de julio.
La aplicación de la nueva Ley Concursal pretende cumplir varios objetivos. Uno de ellos es ofrecer una clarificación sobre las reformas que habían entrado en vigor posteriores a la ley que deroga. No obstante, también se busca la creación de nuevas proposiciones normativas que faciliten la comprensión de quienes deben aplicarlas. Y, por último, relacionado con los objetivos anteriores, se ha buscado eliminar las contradicciones de normas anteriores para mantener una armonía.
La historia de la ley concursal es la historia de sus reformas
Para conseguir alcanzar todos los propósitos, el texto refundido dispone de 752 artículos divididos en tres libros.
El Libro I integra doce títulos sobre las normas concursales generales. Estos títulos están divididos en cuatro bloques con distintos objetos para evitar la mezcla de temas. Además, se han excluido varios títulos con las normas especiales que estaban dispersas.
En el Libro II se trata el derecho preconcursal y se divide, de nuevo, en cuatro títulos independientes. Dichos títulos tratan desde la comunicación de la apertura de negociaciones con los acreedores; hasta las especialidades del concurso consecutivo.
Por último, el Libro III incluye las normas de derecho internacional privado. Éstas se contenían hasta el momento en el título IX de la Ley Concursal, pero ahora se les ha dado un mayor espacio. De este modo, han comprendido todas las normas que afectan tanto a los concurso de acreedores como a los procedimientos incluidos en el Libro II.
Si quieres adentrarte más sobre la nueva Ley Concursal, te invitamos a leer el boletín trimestral de Asesores Tributarios Morante.